¿Por qué se nos complica ahorrar?
Por María Fernanda Valverde Pérez
Noviembre 7, 2019
Querer ahorrar es como querer bajar de peso: lo deseamos con todas nuestras fuerzas, pero pocos son los que de verdad se aplican y lo consiguen. La principal razón por la que ahorrar es casi “imposible” es porque no tenemos disciplina en la planeación de nuestros gastos. No importa lo que ganes, si no tienes control, no habrá dinero que te alcance.
Si no tienes un presupuesto al que apegarte o no tienes metas financieras específicas, el ahorro se volverá una especie de sueño guajiro que sólo anhelarás, pero que difícilmente cumplirás.
Por ejemplo: te encantaría viajar a Europa, tener una camioneta y tomar un curso de dirección de cine; pero todas las mañanas pasas a comprar un café antes de llegar a tu trabajo. No perdonas las comidas de los viernes con los de la oficina, ya tienes el más reciente modelo del smartphone (que compraste con tu tarjeta de crédito), y no puedes decir no a todas las cosas que te ofrecen por catálogo (cosméticos, zapatos, bolsas).
Para empezar a ahorrar lo primero que debes tener claro es una meta que te permita saber a dónde quieres llegar. Si ahorras por ahorrar es muy probable que en el camino te desvíes. Empieza por tener una mirada crítica con tu forma de gastar y la manera en la que defines tus prioridades y objetivos financieros. Si crees que puedes o si crees que no, en ambos casos tendrás razón. Todo es cuestión de actitud y de empezar hoy.
Después ve a la papelería y compra un cuaderno y una pluma. Escribe tus objetivos y prioriza; es decir qué es lo que quieres lograr y cuándo quieres lograrlo (garantizarte un cómodo retiro, hacer un viaje, asegurar los estudios de tus hijos, un auto). No tengas miedo de soñar, pero sueña en específico: viaje a París, camioneta blanca, etc.
La mayoría de las personas “hacen presupuestos” en una servilleta (que después no saben dónde quedó) o en su mente, lo que provoca que todo se quede sólo en buenas intenciones.
Establece plazos y costos para tus objetivos. Lo anterior te ayudará a saber cuánto necesitas ahorrar cada mes y cuánto tiempo tienes para hacerlo. Detallar de esta forma tus objetivos también hará que descubras la viabilidad de ellos (quizá en este momento sí puedas lograr un viaje de aniversario a Los Cabos, pero no a París), además de identificar si requieres de hacer ajustes en tu presupuesto mensual para poder lograrlos.
¿Cómo hacer un presupuesto mensual?
• Haz una lista de todo el dinero que recibes cada mes.
• Incluye cualquier fuente de ingresos que tengas.
• Haz una lista de todos los gastos que pagas cada mes, incluidos los costos fijos de la renta o hipoteca, servicios (cable, internet) y costos variables de ropa, entretenimiento y transporte.
• Si eres trabajador independiente, toma como base un mes en el que tus ingresos hayan sido bajos.
• Resta tus gastos a tus ingresos. Tus compromisos deben ser menores a tu ingreso, pues la diferencia es el dinero que tendrás disponible para cumplir con tus objetivos.
• A partir de tu presupuesto, podrás hacer ajustes para aumentar la cantidad destinada al ahorro.
• Revisa los gastos que puedes reducir o eliminar. Por ejemplo, puedes evaluar si realmente necesitas pagar al mismo tiempo el servicio de televisión por cable y Netflix. Mucho ojo con el dinero que se evapora en artículos no esenciales, como ropa o entretenimiento: es un rubro en el que más se pueden recortar gastos.
Fuentes: Bansefi, El Financiero Condusef
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